Hola primi, buenos días
Hace unos días que no te había escrito, con todo lo del papá la verdad, ha sido complicado ponerme delante del ordenador.
Las primeras horas fueron muy complicadas, temíamos por su estado pero temíamos por perderle, por no verle sonreír más, como nos ha pasado contigo.
Dicen que todo pasa, que el tiempo ayuda a seguir, pero no estoy preparada para perder a nadie más, pues tu ausencia es un vacío tan grande que no me cabe nadie más.
Desde el viernes los días pasan más tranquilos, él está en su habitación, hablando, comiendo, haciendo ejercicios, y rodeado de toda la familia.
Sé que se ha acordado mucho de ti, y sé que tu le has ayudado mucho, no sé como agradecerte la fuerza que me has dado, a mi, a él y a todos los que sufrimos en estos casos.
Cada día al llegar a casa miraba tu foto, te besaba y te pedía, a ti a mi niña, que le ayudases, que me dieses tu ánimo y sobretodo que pasase lo que pasase yo te seguía queriendo como nunca, echando de menos como siempre y pensando en ti cada minuto.
¿Por qué cuando nos pasan cosas desagradables pensamos mucho en quien no tenemos? Les pedimos ayuda? pensamos que dirían? qué harían?
No tengo una explicación pero si un agradecimiento a todos los que no tengo en vida y me ayudan a vivir en paz, feliz y tirando de mi carro, aunque con vosotros aquí todo sería más sencillo.
Siempre tq
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