Nena, hoy van cuatro meses, cuatro meses que no estás con nosotros.
No va a ser un buen día, llevo varios días acordándome de hoy, 4 de febrero, y pensando que ya ves, pasan los días, los meses y todo sigue, y piensas lo injusta que es la vida a veces.
Hablando el otro día con Paloma le dije que para mí ya nada volverá a ser igual, que me faltas tú y jamás esté donde esté y esté con quién esté, mi vida será la misma. Es curioso que te des cuenta de estas cosas cuando te falta la persona en cuestión. Siempre he sabido que teníamos un vínculo especial, pese a que no te gustaban cosas mías y a mí tuyas (poquitas, eh?, prevalecía nuestra admiración mutua), siempre hemos estado unidas, y eso que hemos tenido alguna que otra dónde nos lo hemos explicado, verdad amiga? Creo que ahí radica la amistad, en saberse decir las cosas y que todo continúe igual que antes, en mirarse y decir: "Ehhhhhhhhhhhhhh nana, qué passssssssssa?" Sin rencores, sin mirar atrás, sin echar cosas pasadas en cara... Todas esas cosas nosotras las hemos hecho bien, nosotras sí.
Esta tarde estaremos juntas y hablaremos un rato en silencio.
Te quiero amiga.
Hola Guapa
ResponderEliminarAyer me volví a acordar de ti por varios motivos.
Estaba rebuscando entre las fotos de la boda de mi hermano, una que me pidió. Entonces me acordé de la charla que me echaste cuando te las enseñé y me viste con los zapatos de tacón y las piernas separadas, en todas las fotos. Me reí mucho cuando me lo dijiste y recuerdo que comenté que no todas teníamos el estilazo que tú tenías. Te sonreíste y me dijiste que no era para tanto. La verdad es que si lo era, para una vez que me pongo unos zapatos super fashion, voy y lo estropeo en las fotos. Para esas cosas ya sabes que siempre he sido un poco desastre, me gustaban tus consejos de “estilismo” siempre acertabas.
También estuve con una persona que acababa de perder a su marido. Era una persona mayor, pero sabes? La edad no mitiga el dolor de los que se quedan. No dejaba de recordar lo sola que se quedaba y que no podía creer que su marido se hubiese ido. Era como un mal sueño del que se despertaría pronto. Eso decía.
Pues lo cierto es que yo tampoco podía creer que te habías ido. El día que me convencí por fin, tu prima Irene me acompañó al cementerio a verte y allí estabas. Qué gran entereza la suya y que generosidad por su parte compartir aquel doloroso momento conmigo y contigo. Siempre le estaré agradecida por ello.
Es verdad ya no estás pero tu sonrisa y los buenos momentos que nos has dejado en el corazón y en la memoria, no se irán nunca, por que esos no nos los puede quitar ni un coche ni una carretera, y esa es tu verdadera esencia, la impronta que dejaste en los que te conocimos y te quisimos.
Espero que dejes de regañarme cada vez que me pongo tacones, porque desde entonces, dejo las piernas bien juntitas, por si salgo en alguna foto que veas que tus consejos no caen en saco roto.
Besos
Penélope
Bonita historia Penélope.
ResponderEliminarSiempre tenía la palabra adecuada en el momento oportuno, verdad? Siempre generosa en sus consejos.Yo también hago caso de los que me dió cuando estaba a mi lado.
Un beso.
Recuerdo ese dia perfectamente, nos quedamos el fin de semana en tu casa, recuerdo el comentario de marta mientras veiamos las fotos de la boda de mario. Y lo que mas recuerdo, fue cuando le empezaste a enseñar tu armario a Marta, como le gustaba ver la ropa, sobre todo cuando vio un abrigo tuyo que la encanto y se lo probó, y te decia, nana esto me pega mas a mi que a ti...
ResponderEliminarEse fin de semana fue el ultimo que estuve con ella, e intento no olvidar nada de lo que hicimos.
Un beso marta muy fuerte, por habernos dados tantas cosas, tantos momentos, tantas risas
Gracias Penélope, gracias por tus palabras, por la historia, por hacerme emocionarme recordando todas sus palabras, parece que la esté escuchando.
ResponderEliminarGracias a todas de corazón, hoy y cada día son días difíciles sin ella y si guardo mi entereza en porque ella me lo pide y me da su valor y su fuerza, que no era poco.